Dedicatoria

"Al clamor de los recuerdos,
las voces temerosas y
los alaridos de la tierra"


sábado, 26 de febrero de 2011

Barreras


Peldaños ofuscados con polvo;
ahogados con el silencio, la memoria
de un grito que nadie atrapó en su regazo.

Las barreras que separan mis heridas
son inmensas; deberé cruzar el árido
sendero de espectros sin nombre, 
sin recuerdos ni futuro, renegados
por la soberbia y el genocidio.

Mi única barrera era una espigada correa
de origen metálico. Sin vida ni más intención
que alejarme de los derechos ajenos. Para
recrearme el suelo de mis adagios.


Mi barrera era una cerca donde
se atoraban mis pantalones. Y corría
despavorido  a ocultarme entre las hileras
de flores que colgaban de mis sueños.

Mi barrera era una cerca
que atrataba el rocío por el cual me podía reflejar.

Despierto en otro tiempo.
Mi barrera es mi soledad, los recuerdos
detrás de luna que atestiguó contra la tiraa
y los gritos de auxilio que nadie alcanzó a escuchar...   

 

lunes, 17 de enero de 2011

Pequeños Pies


¿Hasta dónde me llevarán mis pasos?
No tengo voluntad ya para enfrentar los caprichos del dolor,
sólo me queda un camino por recorrer, el de la vida sin la
voz de mi estirpe que ahora pertenece a mi tierra.

¿Hasta dónde habré de llegar?
No sé cuál de tantos lares tomar, ni por qué dar el primer
paso. Las llamas han borrado las brechas que habrían
de guiarme por las entrañas de las montañas que hoy
han mostrado la impotencia de verme solo entre
tanta maldad.

La tierra está fría.
Aún siento la humedad de las lágrimas que derramé
sin entender el por qué de mis lamentos.
Soy pequeño, no terminaré de entenderlo nunca,
pero; las memorias de mi gente que ahora pertenece
a la Madre Tierra me lo recordarán.

Debo partir.
No sé a dónde, ni quién irá conmigo.
Mis pies son pequeños, mi corazón es grande y mi memoria
lo guarda todo, hasta el día en que me obligaron a caminar
solo por estos oscuros lares donde ya no tengo a nadie.